29.12.10

2. Anuncio Inesperado - 1° Parte



Por más que creas que estas sola, siempre va a haber alguien que te apoya.

Mis hermanos y mi papá estaban en la sala. Matt estaba sentado en el sillón grande de cuero café y mi hermana también solo que cada uno en una esquina. Mi papá estaba en el sofá individual, también café. Se veía seria y pensativo como si buscara algo en su mente. No entendí bien el por qué, pero no quise pensar más en eso. Me senté entre mis hermanos, pero más apegado a Matt
- Bueno hijos, ya que están todos, esto... les quiero decir... bueno, que...
- Papá, quieres hablar bien por favor-le pidió mi hermana
- Está bien, lo que pasa es que los matricule en un internado
- ¡¿Qué?!-dijimos los tres gritando
- ¡¿Cómo que a un internado?!-dijo Rosse
- ¡¿Por qué no nos dijiste antes?!-dijo igual de molesto Matt
- Lo siento, en verdad, pero no sabía como
- ¿Y por qué nos vamos a un internado?- pregunto Matt ya más calmado
- Como saben, mi trabajo requiere que nos mudemos constantemente, por lo que me pareció mejor mandarlos a un internado para que no se fueran cambiando tanto tiempo de colegio y pudieran adaptarse mejor
- ¿Cómo se llama a donde vamos a ir?-pregunto Rosse
- Tengan- nos pasó unos folletos- Academia Lago Fénix, está a las afuera de Washington, casi en el bosque prácticamente. Tienen los mejores profesores y las mejores instalaciones
- Mire el folleto y ahí se leí ''Lake Fénix Academy'' en letras negras grandes. Había algunas fotos del lugar. Era grande y se veía que era como en un bosque.
- ¿Cuándo nos vamos?-pregunte
- Mañana a medio día
- Está bien, mejor será empezar a empacar-me levante
- ¿No te molesta?
- No, además no sirve de nada quejarme, ya no hay vuelta atrás
Subí las escaleras lentamente, y entre en mi habitación. No tenía mucho que guardar. Mi habitación no tenía muchas cosas. Estaba mi cama, la cual por supuesto no llevaría, mi armario, un mueble, mi notebook y mi ropa, y uno que otro adorno. Todo pintado de azul oscuro. Le pedí que pintaran la habitación de ese color, ya que antes estaba de un color celeste. Muy alegre para el ''estilo'' que tenía ahora. Tome mi notebook y me senté en mi cama apoyando la espalda en la pared. Lo encendí para poder escribir en mi blog.
Me había hecho un blog para poder desahogarme y escribir todo lo que pasara por mi mente. Bueno o malo. El blog tiene como título ''La vida no me sonríe'' y firma las entradas con un seudónimo. Onnie. No sé muy bien el motivo que me pusiera así pero un día desperté y se me ocurrió. Esto me había ayudado a desahogarme un poco, y la gente que me comenta, me entiende o por lo menos, me apoye. Algo que nunca tuve de parte de mis compañeros. Aquí había conocido a alguien. Un chico. Nada especial, excepto que nos había pasado exactamente lo mismo. Su madre también murió en un accidente de auto, él mismo día pero no en el mismo accidente. Al principio no le creía pero era verdad. Desde ahí que nos llevamos muy bien. Pero no se su nombre, también ocupa un seudónimo. Ángel. Cada vez que hablaba con él, me sentía bien. No me sentía tan sola, alguien me comprendía. Por fin el notebook se encendió. Espere que se conectara en el internet y me conecte al blog. Le puse de título ''Internado'' y empecé a escribir.

“No se cómo reaccionar. La verdad, la noticia me sorprendió, pero mi rostro no demostró ninguna emoción. Mi padre me tomo de sorpresa. ¿Un internado? No me la esperaba. Pero no me importa mucho que digamos. Pero a mi hermana sí, pero, es mi hermana, es algo que debía esperarlo. Mi hermano... Fue algo extraño. Primero se molestó, pero después se relajó. Bueno, el internado de llama 'Lake Fénix Academy' y está a las afuera de Washington. Eso se solamente. Bueno, adiós. Y no se preocupen, voy a seguir escribiendo”.

La publique y me llaman desde afuera de la habitación. Deje al lado el notebook y fui a abrir. Estaba mi hermana con ropa en las manos.
- Ten, tú uniforme-me extrañe
- ¿Uniforme?-pregunte confundida
- Si, usamos uniformes-me paso la ropa- Es una blusa blanca y una corbata negra con rojo, un chaleco negro y falda roja con líneas negras, con calcetas blancas y una chaqueta negra con la insignia del colegio.
- ¡¿Falda?! ¡Odio las faldas!-le grite
- Lo siento, así es el uniforme-se da la vuelta y se va
Suspire enojada y cerré la puerta. Deje el uniforme en la cama y volví a mi notebook. Me fije en la entrada que acababa de escribir y vi que ya tenía un comentario.
Que rápido.
Vi y era de él. Decía: ''Conecte al Messenger, por favor''. Me sorprendí pero me conecte igual.

24.12.10

1. La Vida es un Asco - 2° Parte

El toquido a mi puerta me distrajo de mi puerta.
- Pase...-dije desanimada
La puerta se abre lentamente y se ve el cabello castaño claro y largo, junto con sus ojos verde y la pequeña sonrisa que es común en su rostro entrar en mi habitación.
- ¿Vas a comer?-me pregunto con su dulce voz
- ¿Tú que crees?-le respondí sin ni siquiera mirarla
- Ok...-dijo en voz baja y salió de la habitación
Sigo sin comprender, ¿por qué me preguntan si quiero comer? Saben que yo no como. No he comido en 4 días. Es peligroso, lo sé, pero no tengo hambre. Pero como la semana, no me aguanto más y como. Ha sido así desde su muerte. Nadie me comprende. A mis hermanos es como si mi madre nunca hubiera existido y mi padre... Mejor no hablar con él. En mi escuela, es donde peor me va. No por las clases sino por mis compañeros. Ellos saben lo que me pasa y aun así me lo restriegan en la cara. Y yo solo me defiende, de una forma mala, pero me defiendo. Me he metido en muchos problemas por lo mismo. Pero como dije antes, no me importa en lo más mínimo. Nuevamente el toquido de mi puerta interrumpe mis pensamientos.
- Pase...-volví a repetir
Esta vez no era mi hermana, sino mi hermano. Un chico de cabellos liso y ordeno de color castaño claro, piel de un color damasco y ojos verde, como todos nosotros. Alto y musculoso, serio pero gracioso. Es mi único apoyo. Vi en sus manos y llevaba una bandeja con comida.
- Ya les dije que no tengo hambre-dijo mirando para otro lado
- Pero tienes que comer-se sienta a mi lado en la cama- Ya llevas 4 días sin comer
- Ya sabes como soy, voy a terminar de comiendo igual
- Sí, pero me preocupa, bueno, nos preocupa que no comas, no queremos que te pase nada
- Voy a estar bien
- No es cierto, vamos, come, por favor
- Matt...-trate de convencerlo
- Por favor-dijo con esa voz tan dulce que no me pude negar
- Está bien-suspire- Pero solo porque tú me lo pides, ¿ok?-me sonríe y me pasa la bandeja
- Empecé a comer como desesperada. Aunque lo negase, tenía mucha hambre. Cualquiera tendría hambre si no ha comido en 4 días, ¿no? Matt siempre había sido muy bueno conmigo. Me cuidaba, y me aconsejaba en lo que pudiera necesitar. Pero Rosse no era así. No me llevo mal con ella pero no somos tan unidas como Matt y yo. Al terminar de comer, le devuelvo la bandeja a mi hermano y le digo:
- Gracias hermanito-le sonreí
- Ni lo menciones-le besa la cabeza y se levanta de la cama- Más rato baja porque papá quiere hablar algo con nosotros
- Está bien
Sale y cierra la puerta. ¿De qué querrá hablar mi padre? No lo sé. Me sentiré y sin querer me quede dormida. Tuve un sueño extraño pero lindo. Estábamos sentados en un parque, todos estábamos ahí, incluso mi mamá. Conversábamos alegremente, cuando una nube negra y enorme pasó sobre nosotros, y un viento muy fuerte hizo que cerrara mis ojos. Cuando los pude abrir, no había nadie a mí alrededor. Ni mi padre, ni mis hermanos y ni mamá. Por suerte, desperté. Mi respiración era agitada y sudaba un poco. Mire la hora. 4:0pm. Mejor bajaba. Pero primero fui al baño. Prendí la luz y me dirigí al lavamanos. Abrí el grifo y me moje la cara. Me sequé y me mire en el espejo. No me recordaba que mis ojeras fueran tan grandes. Salí del baño y baje a ver qué era lo que quería decirnos nuestro padre.

~ Fin del Capítulo

20.12.10

1. La Vida es un Asco - 1° Parte


Nunca te das cuenta de lo que tienes, hasta que lo pierdes.

Cinco días. Solo cinco días y las vacaciones se terminaban. ¡Qué mal!, pensaran algunos, y otros quizás se alegraran. Pero a mí, no me importaba lo más mínimo. Por mi me quedara en mi habitación el resto de mi vida. Mi dicho era: ''Mientras más lejos del mundo, mejor''. Yo seguía mal, después de lo ocurrido, no encontraba cura para el dolor que sentía. Mi corazón ya no estaba completo y nunca más se llenaría. Era mi realidad. Y aunque ya habían pasado 1 año, yo no lo lograba superar. Aun recordaba lo que había pasado...

Íbamos en el auto, todos. Mi hermana Rosse, mi hermano Matt, mi papá y mi mamá. Regresábamos a la casa después de haber ido al cine, a divertirnos un rato. Mi padre conducía tranquilamente, nosotros nos reíamos, cuando siento un gran golpe en el costado derecho del auto. Todo empezó a dar vuelta, literalmente.
Cuando paro de girar, el auto había quedado parado en el costado izquierdo. Sentía que un líquido corría por mi rostro. Mi familia estaba inconsciente, todos sangrando, en diferentes parte de su cuerpo. Como pude, y no sé cómo fue, salí del auto. A lo lejos vi un auto también volcado. Miraba a todos lados y había mucha gente viendo pero nadie hacía nada. Todos parecían inmóviles. Fui al auto y trate de despertar a mi hermano que por suerte no tardó en hacerlo. Me ayudo a despertar a mi hermana y a mi padre. Pero al sacar a este último, el auto exploto aun con mi madre adelante.
Di un grito que se pudo haber escuchado en la mitad del mundo. Quería ir por ella pero mi hermano no me dejaba. Era demasiado tarde. Caí sobre mis rodillas y simplemente llore. Como nunca lo había hecho antes. Me sentía destrozada, dolida, muy triste...
Te extraño, mama.

16.12.10

Prologo

Sarah no cree en la amistad. En realidad, ella no cree en nada. Su actitud siempre fue así, y más después de perder a su madre. Se cerró en si misma y no quería salir. Pero todo cambia cuando se va a la Academia Lake Fenix, donde el sol vuelve a brillar.

"Todo el mundo quiere tener un amigo, pocos se dan la molestia de ser uno".